Hola soy Camila y estoy estudiando Naturales.
El tema que estamos viendo es “EL SUELO”. Estudiar el suelo me es muy divertido, porque habla de distintos tipos de suelo. Hay suelos limosos, arcillosos y arenosos. Esto es muy importante para las plantas, animales, microorganismos, bichos, etc.
Desde chiquita me gusto jugar con la tierra, en ella encuentro bichos, semillas, rocas, hago montañas, barro, pozos, etc.
Por ello los invito a estudiar el suelo y que cuando viajen con su familia lo observen, así conocerán los distintos tipos de suelo y verán la vegetación y fauna que posee.
¿QUÉ ES EL SUELO?
El suelo es una mezcla de minerales, materia orgánica, bacterias, agua y aire.
Se forma por la acción de la temperatura, el agua, el viento, los animales y las plantas sobre las rocas. Estos factores descomponen las rocas en partículas muy finas y así forman el suelo; ¡la formación de dos centímetros de suelo tarda siglos!
Existen muchas clases de suelo. Esto se debe a que las rocas, el clima, la vegetación varían de un sitio a otro.
El suelo se compone de tres capas:
Suelo o capa superior
Subsuelo
Roca madre
La capa superior es la de mayor importancia para el hombre. Esta capa contiene los alimentos que la planta necesita. Sin la capa superior o suelo no podría existir la vida. Es de color más oscuro porque tiene materia orgánica que son hojas, tallos y raíces descompuestas. La fertilidad del suelo depende de esta capa. Los agricultores que conservan el suelo tienen mejores cosechas.
El subsuelo: está debajo de la capa superior. Este contiene alimentos, pero en una forma que las plantas no pueden usarlos fácilmente.
La roca madre: está debajo del subsuelo. Es una capa de piedra de la cual la planta no puede tomar el alimento. Esta es la que da origen al suelo.
TEXTURA Y ESTRUCTURA DEL SUELO
TEXTURA: La textura está determinada por el tamaño de las partículas que lo forman. Hay tres tipos de textura: arenosa, mimosa y arcillosa.
ESTRUCTURA: Las partículas del suelo son de formas irregulares y dibujan entre ellas pequeños espacios llamados poros. Los poros contienen agua o aire. El suelo es permeable cuando el agua se infiltra con facilidad a través de sus partículas.
El suelo más conveniente es aquel que tiene poros grandes que permiten la filtración de la lluvia, buena aireación y drenaje más fuerte. Los poros chicos aseguran mayor retención del agua.